Un musculo más que se fortalece con el deporte: El corazón.
En toda persona que practica cotidianamente una actividad física, van cambiando diferentes aspectos de su vida. Los principales cambios están a la vista, porque vemos una mejor apariencia física, la persona empieza a lucir más rozagante, la ropa luce mejor en el cuerpo, y así sucesivamente, sin embargo el cambio más elemental esta en los músculos, porque se inicia un fortalecimiento y tonificaciones en éstos que sin duda hace cambie para mejor la vida de la persona. Esta fortaleza muscular es más notoria en los deportistas, específicamente los corredores, pero si hay cambios afuera ¿Cómo están los cambios por dentro?... pues te decimos que ¡Sí los hay! El organismo de un deportista se ve fortalecido, por ejemplo, se ha comprobado clínicamente que el corazón de una persona atlética está más desarrollado que el de una persona sedentaria.
El crecimiento del corazón humano.
Como sabemos, el corazón es un músculo que bombea la sangre a todo el organismo, entonces surge la pregunta, ¿Por qué el corazón en un deportista es más grande? Pues la respuesta es muy obvia, al crecer todos los músculos, también se desarrolla un musculo más: el corazón. Esto comprueba otro de los beneficios del hacer cualquier tipo de actividad física, como en este caso el desarrollo del corazón humano. El deporte también ofrece otras ventajas y estas derivan en la salud mental de un individuo, pero ese caso lo trataremos en otra ocasión.
La función del corazón.
Decíamos al principio que la principal labor del corazón es enviar sangre por todo el organismo, irrigándola por todos los sistemas, órganos y músculos. Esto nos lleva a hacer la siguiente analogía, si un musculo va a trabajar y cumplir mejor su función al estar fuerte y vigoroso, pues lo mismo va a suceder con el corazón, que va a tener un mejor desempeño gracias al desarrollo muscular inherente al deportista. La función del corazón es clave en beneficio de todos los sistemas del cuerpo, mientras mejor haga que fluya la sangre, mejor será la salud del deportista, es por ello que una vez más se certifican los beneficios de practicar continuamente algún deporte. Ahora bien, más allá del crecimiento y fortaleza del corazón ¿Qué otras cosas cambian en el corazón que mejoran su funcionamiento?
La frecuencia cardiaca y las pulsaciones normales.
El ritmo cardiaco es un aspecto importante dentro de la salud cardiovascular, como sabemos una de las características determinantes de la actividad deportiva es el aumento de la frecuencia cardiaca, lo cual es normal, sin embargo una variación de dicho ritmo, sin una causa aparentemente normal, es signo de alarma para la salud de cualquier persona, allí radica la importancia de la visita periódica a un médico cardiólogo que pueda determinar cabalmente el estado de nuestro corazón. Las pulsaciones normales de una persona adulta, mientras está en reposo deben estar entre 60 y 100 por minuto, si por algún motivo éstas están por encima o por debajo de ese rango, algo malo puede estar sucediendo.
El corazón del deportista y su predisposición a superar dolencias.
Mucho más allá de un crecimiento en sus dimensiones, el corazón del deportista se hace más propenso a superar cualquier situación que puedan sufrir las arterias, principalmente porque así como crece para bien todo el corazón, lo mismo pasa con las arterias, estas se expanden y hacen que la sangre pase a través de ellas con mayor facilidad, haciendo más fácil superar cualquier obstrucción. En las presentes líneas hemos sido bien puntuales en ofrecerte algunos aspectos importantes en los que el deporte beneficia a un corredor, así que te invitamos a seguir mejorando tu salud por medio del deporte, y si aún no haces alguna actividad física frecuente, es el momento de tomar una de las mejores decisiones de tu vida.